A los Virgo no les gusta ser el centro de atención, poco hablador y gusta de la soledad. Cuida con esmero los detalles, su aspecto, extremadamente puntual y perfeccionistas en todo lo que hace. No es demasiado fiestero, será difícil ver a Virgo fuera de control, bailando como un loco y trasnochando día tras día. Está siempre demasiado ocupado, y no tiene tiempo para soñar. Para Virgo estar preocupado es algo natural. Posee una gran claridad de pensamiento.
Suele gustar de vestir bien, con un gusto meticuloso, y muy conservador. Aunque exteriormente se muestren capaces y serenos, su angustia interior les carcome. Son gente nacida para ser tranquila y apacible. Es gente confiable y sincera, pero son capaces de sacar su talento de actor cuando tienen que fingir para conseguir algo con ello.
Virgo se aferra a su soltería, pero también los hay que terminan comprometiéndose para toda la vida. Quizás no lo hagan llevados por un súbito estallido de fuego y de pasión pero es sorprendente lo bien que dominan esta situación siempre muy dedicados a su familia. Son gente de hábitos muy marcados e intentarán llevarlos allí a donde vallan.
Es instintivo para él poner orden donde no lo hay. Será el primero en levantarse y ayudarte a limpiar y ordenar todo después de una fiesta. Pero también será el primero en darse cuenta de todos los detalles en lo que preparaste, cosa que agradecerás mucho.
Es de los que ven el defecto en los demás y es incapaz de reconocer los suyos propios, pero esto es sólo la apariencia: Virgo se da cuenta perfectamente de sus defectos y limitaciones pero no le gusta hablar de ello y por supuesto nunca lo reconocerá, actuará como si tal cosa.
No son derrochadores ni con sus afectos ni con el dinero. No les gusta aceptar favores, no les gusta depender de nadie, ni deber nada a nadie. Sus opiniones son muy claras con respecto a los despilfarradores y los que no quieren trabajar: no le gustan nada y no lo esconden.
Son personas sorprendentemente sanas, pero son muy propensos al estrés, debido al exceso de trabajo, tensión mental, preocupaciones. Se ocupan mucho de su aspecto y cuidan mucho su dieta. Aman la verdad, la puntualidad, la economía y la prudencia y aborrecen los torrentes de sentimentalismo, la suciedad, lo vulgar, el abandono y la ociosidad. Son de naturaleza práctica, con excesiva tendencia a la discriminación.
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